La visita de Calden Viajes a la quesería El Holandés en Tandil fue una experiencia única para los viajeros, quienes tuvieron la oportunidad de sumergirse en la tradición quesera de la región. Recibidos con calidez por Alicia Van Olphen y su equipo, los visitantes disfrutaron de una jornada de degustación donde pudieron probar una variedad de quesos artesanales, desde el clásico gouda hasta provoletas condimentadas con orégano, ají y pimienta.
El recorrido incluyó una explicación sobre el proceso de elaboración de los quesos, destacando la pasión y el esfuerzo que han convertido a El Holandés en un referente de la producción quesera en Tandil. Además, los viajeros pudieron conocer otros productos elaborados en el establecimiento, como dulce de leche y ricota.
La hospitalidad de Alicia y su equipo hizo que la visita fuera aún más especial, creando un ambiente acogedor donde cada detalle reflejaba el amor por la tradición quesera. Sin duda, una experiencia que dejó a los visitantes con ganas de volver a disfrutar de los sabores auténticos de Tandil. ¿Te gustaría agregar algún detalle más sobre la visita?
Alicia Van Olphen es una figura clave en la tradición quesera de Tandil, Buenos Aires, y su legado se encuentra profundamente arraigado en El Holandés, un establecimiento con más de 50 años de historia. Su familia, de origen holandés, se estableció en Tandil con la misión de producir quesos artesanales de alta calidad, logrando consolidar un tambo y una fábrica propia en un rincón pintoresco de la región.
A lo largo de los años, El Holandés se ha especializado en la producción de quesos como gouda, sardo, reggiano y provoletas condimentadas, además de otros productos lácteos como dulce de leche, ricota y yogurt. Alicia ha sido una de las grandes impulsoras de esta tradición, contribuyendo al desarrollo del sector lácteo y promoviendo la excelencia en la producción artesanal.
Su trabajo ha sido reconocido en diversas instancias, y su historia forma parte de las Historias del Bicentenario de Tandil, destacando su impacto en la comunidad y en la industria quesera. Su legado continúa vivo en cada pieza de queso que se elabora con pasión y dedicación en El Holandés, un verdadero tesoro gastronómico de la región.